Bajo el cielo de Múnich

Me he puesto a organizar fotos y fotos y de repente se me ha ocurrido escribir esta entrada, dedicada a todos aquellos que se han lanzado a visitarnos en nuestro nuevo hogar. No hace falta decir la ilusión que nos hace cada vez que viene alguien, ¡nos ponemos hasta nerviosos! Queremos que estén a gusto, se lo pasen bien y que visiten muchas cosas, aunque lo que mas nos gusta es pasar unos días con ellos, por eso, ¡MUCHAS GRACIAS A AQUELLOS QUE HABÉIS SACADO UN HUEQUITO PARA VENIR A VERNOS! Dicen que el primer año o los primeros meses son los mas duros, a nosotros nos ha salido todo bastante bien pero eso no quita que haya momentos de tristeza y nostalgia, por eso haber recibido visitas en este primer año ha sido genial. DANKE!!!!!

365 días, 52 semanas, 12 meses, 1 año. Ese el tiempo que llevamos viviendo aquí, en Alemania. Aunque ha pasado como un mes, volando y casi sin darnos cuenta. Nos ponemos a recordar y nos pasa algo curioso: el tiempo que estuvimos sin Pancho y Greta parece que no ha pasado y eso que fueron unos 7 meses... Es como si hubieran estado aquí desde siempre. A menudo pensamos en eso. También pensamos mucho en cómo estamos aquí, parece que somos mas conscientes de nuestra vida. Somos conscientes de todo lo bueno y también de lo malo. Lo malo: nuestras familias y nuestros amigos, a los que echamos de menos todos los días. Lo bueno: todo lo demás. Durante este tiempo nos hemos acostumbrado al tiempo, la comida, los horarios y algunas cosas de la forma de vida alemana... Y nos gusta. Nos gusta la naturaleza, los bosques, los lagos. El frío y la nieve. La cerveza. La tranquilidad. Las ferias y el Oktoberfest. El carril bici y las flores...Y algunas cosas mas. Con esto no quiere decir que Españ